Medios y Remedios
Las Lunas del Auditorio

Tan lejos de Dios y tan cerca de los Estados Unidos.
No hay país en el mundo tan influenciado por la nación vecina como el nuestro.
Apenas me reponía de la exagerada cobertura televisiva sobre el aniversario de los atentados del 11 de septiembre -por un momento pensé que estaba viendo CNN, en lugar de la televisión abierta de este país- cuando el viernes por la noche se transmitió por Azteca 7 y Galavisión la entrega de los Premios Lunas del Auditorio, una copia mal hecha de los Grammys o MTV Video Music Awards.
El programa fue el claro ejemplo de cómo suelen salir las cosas cuando no se tienen ideas propias.
Para empezar, el concepto es idéntico a cualquier “show” estadounidense: alfombra roja, público viendo llegar a los artistas y un área de prensa. Todo muy E! Enterteinment. Hubo músicos invitados y dos maestros de ceremonias, Rebeca de Alba y Héctor Bonilla.
Lo que se vio en televisión fue un derroche de recursos tirados a la basura. Las conductoras, Mónica Garza y Liza Echeverría, sentadotas en sofás, acartonadas, presumiendo a la televidente las toneladas de equipo de producción que se habían conjuntado para el evento, mientras que los reporteros hacían preguntas obvias a los artistas: “¿cómo te sientes por tu premio?, ¿qué opinas de los trofeos?”.
Por su parte, de Alba y Bonilla se vieron inexpresivos como consecuencia del insostenible guión que les escribieron. Aunque lo más grave no fue el libreto, sino que el moderno tele-prompter que les pusieron estaba muy por debajo de su campo de visión, lo que les hacía no ver directo a la cámara, sino al piso. Y eso es una grosería en la televisión.
En lugar que la entrega de Las lunas empiece a marcar un estilo propio, parece que ya está en las últimas. Lo único que lo medió salvó fue la presentación de El Tri, que hizo reaccionar a los asistentes que se negaban a cantar Triste Canción: “¡no manchen, que se oiga la banda!”, les gritó Lora, y hasta Silvia Pinal terminó por tararearla.
Por último, qué tercermundista resultó que patrocinadores y organizadores no lograran un acuerdo para transmitir en vivo la entrega de los premios y haya tenido que hacerse dos días después.
Zapping
Tanto es el rating que TV Azteca ha perdido los domingos, que ayer pusieron a competir una vez más a Yahir y a Miriam en Homenaje. Por lo mismo, la próxima semana inicia Estrellas de novela, que al ser un concepto novedoso en México quizá termine por ser un éxito como La academia... ¿Se fijaron que en la cobertura televisiva de la cumbre de la OMC, nadie hizo un análisis serio o propuso un debate sobre las posturas de los globalifóbicos? La televisión tendría que haberlos tomado en cuenta, más allá de sus actos vandálicos, ¿no creen?